ABS del coche: información y claves

Es un elemento de seguridad activa del coche. La seguridad activa hace referencia a todos los sistemas que ayudan al coche de manera activa para evitar un accidente. Algunos de estos sistemas son las luces, el control de estabilidad o el ABS. En Romadrid te contamos qué es y todas las claves que debes conocer para mantenerlo en buen estado.

¿Qué es?

Es uno de los elementos de seguridad activa más importantes de nuestros coches. Por sus siglas Anti-Lock Braking System, también conocido en español como Sistema Antibloqueo de Frenos, permite al conductor no perder el control del coche en una situación de frenada brusca.

A la hora de frenar de manera violenta y a la vez mover la dirección para esquivar un obstáculo, el coche no perderá tracción gracias a este elemento. Este elemento de seguridad juega un rol fundamental cuando circulamos ya que puede ser determinante a la hora de salvarnos la vida en situaciones peligrosas.

Cómo funciona

Está compuesto por muchos elementos que se conectan entre sí para dar un funcionamiento perfecto y que el sistema de frenos actúe al instante según demande el conductor. Los siete componentes son: ruedas dentadas, tanque de aire comprimido, válvula del pedal de freno, cilindro de diafragma, válvulas de presión, unidad de control y sensores de velocidad.

El sistema evita que las ruedas del coche se bloqueen y que, al frenar, el conductor mantenga el control del coche. El sistema electrónico detecta si la velocidad de giro de alguna de las ruedas disminuye, y modifica la presión de alguna de ellas para ajustar velocidades de giro y así que la frenada sea efectiva. Todo esto sucede en fracciones de segundo.

Testigo

Cuenta con un testigo en el cuadro de instrumentos que generalmente es de color amarillo, lo que indica que algún componente está fallando y hay que ir a repararlo antes de que la avería sea más grave. Un fallo en el sistema de frenado provocará que se encienda el testigo y puede deberse a fallos o averías inminentes en uno de sus componentes. Estos son:

1. Fusible.
2. Sensores.
3. Líquido de frenos.
4. Pistones.
5. Circuito de frenos.
6. Tuberías rígidas.
7. Servofreno.
8. Anillo dentado de las ruedas.

Mantenimiento y reparación

Ya que se compone de muhos elementos diferentes conectados entre sí, es importante realizar un buen mantenimiento de todos ellos. Certificar el buen estado de los componentes, cambiar el líquido de frenos cuando indique el fabricante y acudir al taller si el testigo del cuadro de instrumentos se enciende, son las tres claves del mantenimiento.

El coste de reparación de una posible avería de los frenos varía según qué componente o elemento se estropee. Un simple mantenimiento puede ser algo de 100 o 200 euros si solo tienes que ajustar o cambiar algunas piezas pequeñas o reparar algún sistema. Si tienes por ejemplo que cambiar las válvulas, podrán ser 700 u 800 euros de reparación.

Cómo frenar con y sin ABS

Es importante saber si tu coche cuenta con frenos ABS o no. La mayoría de los coches disponen de este sistema de frenado y llegado el caso de tener que hacer una maniobra durante una frenada brusca, no habrá problema. Solo debes saber que es importante pisar a fondo el freno y el embrague, para que el coche no se cale si reducimos mucho la velocidad.

Si tu coche no dispone de ABS, la situación es parecida, pero a la hora de maniobrar debes soltar el freno y el embrague, realizar la maniobra rápidamente, y volver a pisar el pedal del freno del coche a fondo.