Correa de servicio del coche: función y mantenimiento
La correa de servicio es la encargada de mover el alternador. Es una correa, que también se denomina del alternador o de servicios, y está implicada en otros elementos como la dirección asistida o el aire acondicionado. No tiene nada que ver con la correa de distribución que es una confusión bastante habitual de los usuarios. En Romadrid puedes consultar todo lo que necesites sobre mecánica y nuestros profesionales te ayudarán en lo que buscas.
Qué es la correa de servicio del coche
La correa de servicio es una correa de goma reforzada por fibras que se encargan de que ésta no tenga holguras cuando se ajustan las poleas que van colocadas en el exterior. Es fácil de saber cuál es nada más abrir el capó porque está a la vista y con el motor en marcha se ve funcionando. Mucha gente confunde la correa de servicio con la correa de distribución, cuando realmente la de distribución está dentro del motor y no la podemos ver. Mientras que la de servicio es la que vemos girar de manera síncrona con el motor cuando levantamos el capó.
Esta correa se dedica a mover el alternador para generar energía que se acumula en la batería del coche. También tiene función en la dirección asistida y el aire acondicionado. Sin esta correa, el coche no generaría electricidad y por tanto no podría funcionar. No podrás circular si se rompe la correa de servicio porque también interviene en las piezas de la dirección aprovechando la rotación del cigüeñal, por lo que no se puede conducir.
Mantenimiento de la correa de servicio
Tener bien mantenido el vehículo es lo más importante si buscas alargar la vida útil del coche. La correa de servicio, como muchos otros componentes del coche, requieren de un cuidado y un mantenimiento regular para tenerla en buen estado. El primer mantenimiento de la correa es el más fácil. Levantar el capo y ver si los componentes que rodean a la polea o la propia goma están bien, no tiene un desgaste excesivo y los tensores y rodillos están en orden y sin bloqueos o tensiones innecesarias.
La correa de servicio se revisa a la vez que la correa de distribución. Cuando se cambia o se realiza el kit de distribución entre los 100.000 o 150.000 km, también se suele realizar el mantenimiento de la correa del alternador. En cambio, si el coche no tiene distribución y va por cadena, la revisión o mantenimiento de la correa de servicio se realizará de manera independiente y se suele cambiar entre los 60.000 y 120.000 km.
Precio correa de servicio
El coste de reparación de esta correa no es muy caro sobre todo si se compara con otros elementos. Incluyendo la sustitución y mano de obra la correa de servicio suele costar en torno a los 100 euros. Es bastante rentable para ser un elemento que dura aproximadamente 100.000 km. Es mejor revisarla periódicamente para intervenir a tiempo ante un posible elemento dañado antes que tener que cambiar todas las piezas.
Al igual que comentábamos con el kilometraje establecido para el cambio de correa, con el precio de una posible avería pasa lo mismo. Y no debemos confundir el cambio de la correa de servicio con la de distribución. El precio cambia según las características del motor y el tipo de coche y sus cualidades. La cantidad puede oscilar entre los 300 y 600 euros por lo que sería una reparación de lo que se conoce como kit de distribución. Si hay alguna avería más grave o hay que reparar elementos dañados derivados de la avería de la correa, podríamos hablar de precios que superen los 1.000 euros.
Síntomas de posible avería de la correa
Uno de los síntomas más habituales que avisa del desgaste y que advierte de una posible avería próxima, es un ruido metálico desagradable. Esto puede deberse a algún rodillo o un tensor en mal estado. Si se rompe algún componente, el testigo de avería de la batería se encenderá y el cuadro de instrumentos indicará la avería o posible incidencia.
Abriendo el capó se puede observar claramente la avería. Si la correa está y no se ha soltado, se puede circular hasta el taller o si el trayecto es muy corto conducir hasta detenerse. En cambio, si la correa no está, hay que llamar a la grúa o asistencia en carretera para que trasladen el coche ya que no podrá circular y no tendrá dirección.
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