Aunque la tecnología de los coches avanza cada vez más, no es posible eliminar por completo los riesgos mecánicos: el fading es uno de ellos. El fading es un fenómeno que afecta negativamente al sistema de frenado del coche, en concreto una pérdida de eficacia del sistema de frenado: principalmente se debe al sobrecalentamiento del sistema.
Es fundamental que hagas una revisión continua del sistema de frenado, siendo uno de los principales de elementos de la seguridad activa. Para evitarlo, deja que profesionales del mundo del motor haga una revisión de las pastillas, de los discos, del líquido o de la bomba.
Fading: ¿Qué es y cómo se produce?
Fading es el término inglés con el que se conoce “pérdida de potencia” y hace alusión directa al sistema de frenado. Es una de las peores situaciones que podemos encontrarnos mientras conducimos, ya que el freno es el primer sistema al que recurrimos para controlar la conducción segura.
Algunas de las causas del fading o pérdida de freno es un exceso de carga, un mantenimiento inadecuado, una conducción inadecuada o un sobrecalentamiento del sistema de los frenos: este último es el más frecuente y grave, causado directamente por un sobrecalentamiento del líquido de frenos y la cristalización de las pastillas de freno. Esto desemboca en un tacto mucho más rudo del pedal del freno.
Hay un indicativo clave, que es el líquido de frenos según el tipo de conducción que vas a realizar. Hablamos de DOT3, DOT4 Y DOT5: DOT3 con un punto de ebullición en seco de 205ºC, DOT4 con un punto de ebullición de 230ºC y el DOT5 su punto de ebullición es de 260ºC. El líquido tiene una duración determinada, por eso hay que cambiarlo cada año para mantener las propiedades intactas, apostando también por las primeras marcas del mercado.
Tipos de Fading
Existen dos tipos de fading, que abundan en los coches incluso en los más actuales. Se trata del fading por el sobrecalentamiento en la pastilla de freno, lo que produce un pedal duro y por tanto un aumento del tiempo de frenado, así como la capacidad de frenado más eficaz.
Derivado de este sobrecalentamiento, también puede darse un segundo tipo de fading: el provocado por las burbujas de aire en el líquido de frenos, ya que este llega a ebullición. Al contrario que con el otro tipo de fading, en este caso el freno se vuelve mucho más blando, lo que puede resultar muy peligroso de cara a calcular los tiempos de frenado.
¿Cómo evitar el fading en tus frenos?
Las principales consecuencias del fading son la situación de peligro, ya que en muchas ocasiones no sabemos cómo actuar correctamente ni nos esperamos los síntomas. Además, las reparaciones pueden ser muy costosas si no tenemos en cuenta antes este tipo de daños.
Si quieres prevenir el fading, revisa el coche de forma frecuente, lleva a cabo un buen mantenimiento, cambia el líquido de frenos cada año y no utilices de manera prolongada los frenos. La conducción suave un gran aliado para mantener tu coche en perfectas condiciones. Además, siempre hay que emplear repuestos de calidad., que están asegurados en el taller Romadrid.