Todo lo que debes saber sobre remolque del coche

Un coche arrastrando una embarcación hacia la costa, una motocicleta que luego se utilizará como medio de transporte en el destino, o remolcando las bicicletas de toda la familia. Conectar un remolque al coche permite transportar objetos tan grandes o incluso más grandes que el propio vehículo, siendo un complemento extremadamente útil. Por eso en Romadrid te contamos todo sobre este elemento y puedes echar un vistazo a modelos Ford disponibles con remolque como el Ford Ranger.

Existen remolques livianos que se pueden enganchar fácilmente por alrededor de 300 euros, sin necesidad de realizar ninguna otra acción. También hay opciones más grandes y caros que requieren una licencia especial y un seguro adicional. La diferencia reside principalmente en el peso, y la distinción entre ambos tipos se establece en una Masa Máxima Autorizada (MMA) de 750 kilos.

Cómo poner el remolque en el coche

Para comenzar, es necesario colocar un enganche o gancho que permita vincular la plataforma de carga al vehículo. Este enganche puede ser de tipo fijo, siendo la opción más asequible con un coste de aproximadamente 250 euros, o retráctil, con un precio a partir de 500 euros. La instalación debe llevarse a cabo en un taller y debe ser registrada en la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en un plazo no superior a 15 días. Este procedimiento quedará reflejado en la ficha técnica del vehículo. La omisión de este paso se considera una infracción grave, sujeta a una multa de hasta 400 euros.

Conducir con un remolque

Además, al conducir un vehículo remolcando una plataforma, es necesario adoptar un enfoque específico al manejar, ya que los límites de velocidad son diferentes y se requiere cierta destreza en la conducción en curvas cerradas y durante las maniobras de estacionamiento. Por lo tanto, es aconsejable practicar en áreas abiertas, como un espacio sin obstáculos, antes de emprender un viaje por carretera.

Garantizar una sujeción sólida de la carga en el remolque es otro aspecto fundamental, ya que, de lo contrario, la carga puede desplazarse y afectar la estabilidad del conjunto, e incluso caerse. En el caso de objetos grandes, se deben intentar centrar en la medida de lo posible en la plataforma, mientras que para objetos más pequeños es preferible ubicarlos adelante del eje de las ruedas de la base de carga.

Consejos clave para conducir con remolque en el coche

• Velocidad. En vías de alta velocidad como autopistas y autovías, el límite de velocidad se ve disminuido a 90 km/h cuando se remolca un tráiler, mientras que en carreteras convencionales se reduce a 80 km/h. En áreas urbanas, los límites permanecen sin cambios, siendo de 30 o 50 km/h dependiendo del tipo de vía.

• Marcha atrás. Al realizar la maniobra de marcha atrás, el remolque sigue una dirección opuesta a la del vehículo tractor, siendo esta una de las maniobras que requieren más habilidad al volante. Para simplificar la tarea, es recomendable alinear la plataforma de carga con el automóvil tanto como sea posible.

• Curvas. En curvas más amplias, generalmente no surgen problemas y el manejo del automóvil es casi idéntico. Sin embargo, en curvas más cerradas, el remolque, debido a su trayectoria de giro diferente, puede invadir parcialmente el carril contrario.

• Viento lateral. La influencia del viento es moderada cuando el remolque es bajo, pero si las ráfagas de viento son fuertes, pueden alterar la trayectoria recta del vehículo. En condiciones ventosas, se debe tener precaución al adelantar camiones en autopistas y al pasar de áreas protegidas lateralmente a zonas más abiertas.

• Distancia de frenado. Debido a la inercia de la masa adicional, la distancia de frenado se incrementa, por lo tanto, es crucial aumentar la distancia de seguridad con respecto al vehículo que precede.

• Subidas y bajadas. Tanto en ascensos como en descensos, es aconsejable reducir una o dos marchas. En las pendientes ascendentes, esto ayuda al automóvil a lidiar con el peso adicional, mientras que en las bajadas contribuye a controlar la velocidad mediante la retención del motor.

Tipos de remolques

En relación con el peso de la carga a transportar, los remolques se clasifican como ligeros o pesados.

Remolque ligero

La conducción de este tipo de remolque es autorizada con el permiso de conducir B, siempre y cuando su Masa Máxima Autorizada (MMA) no exceda los 750 kilos. No es necesario matricularlo ni obtener un permiso especial para circular. Utiliza la misma placa que el vehículo tractor, pero debe estar registrada en la ficha técnica del automóvil. Aunque no requiere pasar una Inspección Técnica de Vehículos (ITV) de manera independiente, debe estar presente cuando el vehículo tractor se somete a inspección.

En relación con el seguro del coche, a pesar de que la póliza del automóvil principal cubre cualquier posible incidente, es esencial informar a la aseguradora sobre la presencia del remolque y la instalación del enganche correspondiente. Ambos elementos deben estar especificados en el contrato.

Remolque pesado

Su Masa Máxima Autorizada es superior a 750 kg. Para conducirlo, además del carné B, se requiere el permiso B+E. La primera autoriza la conducción de un conjunto de vehículos con una MMA total que no exceda los 4.250 kilos. En caso de superar este peso, se debe obtener el permiso B+E, que habilita la conducción de un remolque con una MMA no superior a 3.500 kg.

A diferencia de los remolques ligeros, los pesados se consideran vehículos independientes. Se deben matricular (con placa roja), someter a inspección en la ITV (cada 2 años durante los primeros 6 años, anualmente entre los 6 y 10 años, y cada 6 meses después de los 10 años) y asegurar de manera específica con al menos una póliza de responsabilidad civil, como cualquier otro vehículo a motor.

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